Como endurecer una linea de bajo II

La línea original de la que partimos es más bien "blanda", es decir, con un ritmo relajado, que no propulsa especialmente el ritmo. Una base basta¡te adecuada para Pop. Sin embargo, puesto que nos proponemos "endurecer" esta línea veremos algunas variantes que nos lleven hacia ese punto. La primera variación que haremos consiste en convertir la negra del tercer tiempo en dos corcheas. Esto resultará muy efectivo, sobre todo porque, si escucháis atentamente la base del CD, notaréis que el bombo de la batería toca esas dos corcheas. No existe ningún problema en que el bajo toque una negra, mientras la batería toca dos corcheas, pero si hacemos que el bajo las acompañe, lograremos una mayor solidez en la base. Puesto que no es necesario reproducir la línea completa, ya que ésta se basa en un patrón a fin de sintetizar, mostraremos solamente el patrón base, a partir del cual se modifica toda la línea. 

Con este paso, habremos conseguido una base algo más sólida, pero que aún está algo lejos de ser "dura". Una forma sencilla de aumentar su robustez y, al mismo tiempo, darle más proyección rítmica (es decir, más "empuje"), sería cambiar la negra del cuarto tiempo, también por dos corcheas. 

En este punto, habremos conseguido una línea con buena presencia y con empuje, pero aún podemos hacer más. En los tiempos 1 y 2 tenemos una negra, un silencio de corchea y una corchea. Esta fórmula que no tiene nada de malo, es muy adecuada para un tema Pop, pero tal vez no proporciona toda la rigidez que se podría desear en una base de rock. En el paso siguiente cambiaremos ese contratiempo (corchea) por una fórmula más dinámica. 

En este último cambio, hemos agregado un ataque en el segundo tiempo, y convertido el contratiempo en un contratiempo de semicorchea en lugar de corchea. El cambio podría parecer, incluso más sutil que los anteriores, pero sin embargo tendrá un efecto más notorio, ya que, por un lado agregamos una pulsación sobre el tiempo 2, lo que dará al conjunto una sensación de mayor continuidad y, por otro, eliminamos el contratiempo de corchea, convirtiéndolo en una semicorchea Este contratiempo, al no estar precedido de silencio, técnicamente, deja de ser un contratiempo, y tendrá un efecto más de "adomo", o de pequeña anticipación/ que de contratiempo. En conjunto, la línea final deberá sonar mucho más agresiva. Ciertamente, aún podríamos darle más rigidez al conjunto, utilizando corcheas en los dos primeros tiempos.