Como final de tabla, nos
; encontramos con la figura 7,
tampoco tiene mayor complicación sin embargo es muy
buen ejercicio. Es un desplazamiento
rítmico que se recupera
por sí mismo en cada
compás de 4/4, y lo interesante
es que termina tocando
nota natural y enlazando con
nota natural al principio del
siguiente compás; ya veréis
qué vacilón se trae el ejercicio
a medida que se incrementa la velocidad... Bueno, ahora
que hemos llegado al final de
nuestra tabla, una recomendación:
todos estos ejercicios hacedlos también muy despacio
con el pulgar a modo de
Slap, es una buena manera de
practicar esta técnica.
Una vez vista la tabla, quiero
comentaros el orden de progresiones
lógicas, me he saltado
muchas posibles combinaciones,
ni qué decir tiene que
debéis buscarlas vosotros mismos,
pues son muy evidentes,
simplemente os he lanzado
algunas ideas para no alargar
demasiado el artículo.
A continuación y sobre una sencilla
línea de bajo estilo latin, figura
8, vamos a tratar de introducir
notas mutadas.
Primeramente mostramos la
línea, cuatro compases que
terminan con una ligadura de
duracióry para anticipar la
primera nota de lo que sería
el siguiente compás:
Por fin el objetivo... la figura
9. Hemos modificado la línea
anterior. Fijaos bien en qué
sitio están emplazadas las
notas mutadas y, muy despacio,
intentad tocarla. Daos
cuenta, además, de que estamos
mutando alguna nota
que no se encuentra sobre
cuerda al aire, se toca en el
mismo lugar donde se ejecuta la nota natural. de manera que ya comienza otro tipo de
dificultad, coordinar en tiempos fluidos el hecho de
"tapar" y "destapar".
Podréis
comprobar que en los dos
primeros compases cambiamos
los puntillos por notas
mutadas, dando la sensación
de que una percusión está ejecutando
esos golpes de
apoyo.
En el tercer compás
comenzamos de la misma
manera pero el final es la subdivisión
de la negra en dos
notas, la primera mutada y la
segunda natural y anticipando
al siguiente compás.
En el
último, por fin, se crea un
efecto muy interesante con
dos cuerdas al aire antes de
anticipar la última corchea
con lo que sería el compás
siguiente.
La nota D que aparece
en el último compás (tercera
línea del pentagrama) se
deberá tocar en el 5 traste de
la tercera cuerda para lograr
el efecto de la partitura (tapar
dos cuerdas consecutivas y
descendentes) Ni qué decir
tiene, que esta línea latin es
una idea muy básica, desde
aquí os animo a emplear
vuestros propios recursos rítmicos en las líneas de bajo, a
que le echéis imaginación en
los tiempos y contratiempos,
pero siempre respetando las
pautas de cada estilo musical.
Sobre todo, escuchad a los
grandes bajistas, pues es de
donde más se aprende y las
ideas fluyen.
Espero que el artículo os haya
parecido interesante.
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